Sheikh Zayed Grand Mosque

De regreso hacia el aeropuerto, he pasado cerca del Sheikh Zayed Grand Mosque y no me he podido resistir. Sus enormes minaretes llamando a la oración y yo otra vez sin la cámara, pero ya me estoy haciendo un experto con el teléfono móvil.

Para entrar, primero hay que comprobar si vamos como debemos. Mi querida madre, no hubiera entrado. Siempre tuvo la frente muy alta...y la falda muy corta.

 

Os dejo unas fotos, del típico turista...

...desde el exterior

...desde el patio interior

....desde el interior de la mosque

...desde otro exterior

Por cierto, es la primera vez que para ir a mear, me he tenido que descalzar. El cuarto de baño estaba en la zona de ablución. Un poco de cosa, a pesar de lo limpio que estaba, sí que da.

Y después paseíto por el paseo marítimo ”La Corniche” que como en todas partes, al atardecer, comienzan a colocarse las cañas, más que para pescar, para disfrutar de la charla y de las puestas de sol.

Ampliación -1

Agradeciendo los comentarios de mi querida lectora,por la conversación mantenida esta tarde, tiene que ser mi madre, en la que me decia que:

-estoy equivocado, que sí que entró. Eran otros tiempos.

-echaba de menos alguna foto sobre las arañas de Swarovski. 

Es verdad, que no te dejan indiferente. A mi personalmente demasiado llamativas...

 

Shah desert

Tiempos de cambio. Después de la época de tormentas de arena que nos estamos tragando – no es una metáfora- dicen que llegará el calor. Ahora solo hemos alcanzado los 33 º C.

 

Solo han pasado días, pero parecen meses desde mi experiencia TOP LUXURY de mi entrada al blog anterior. El trabajo en este lado del mundo  me hace perder la realidad del tiempo, no sabiendo ni en qué día vivo.

Hay que levantarse muy temprano y acostarse muy tarde,  lo que hace casi imposible cualquier actividad que no sea la estrictamente laboral.

 

Aunque, también es verdad que sigo disfrutando…del paisaje. Sobre todo, en los atardeceres de regreso. Para cualquier lado que mires desde el 4x4, todo son dunas y dunas doradas que llenan todo el horizonte. Lo único malo es que el que conduce,  le gusta que el coche se le deslice, surfeando, pero con el ruido de fondo, en lugar de los beach boys, el pitido de la alarma del vehículo cuando pierde adherencia.

 

Escaparte del campamento al final de día, y perderte entre las dunas, es una gozada. El lenguaje del desierto, si te paras a escucharlo, no hay silencio.

Abu Dhabi- disfrutando del viaje

El lujo de la sala business de Franckurt de ETIHAD AIRWAYS, se minimizó al realizar el vuelo en First class del Airbus Industrie A340-500. ¡Es una suite!

 

¡Qué detalles!

Hasta me parece que me sonrían más de lo habitual mientras me  enseñaban el mini bar, el armarito, y todos los entretenimientos a mi alcance… Me gusta.

Y venga a darme cosas…, cuando llegó el pijama, me quede pensando que es lo que vendría después. Solo me faltaba el mayordomo para ayudarme a poner las zapatillas. Pero ese, no llegó. 

Lo mejor de todo,... el momento de acostarme. Sin decir nada, deben tener “poderes para normales” se acerca la azafata, con un juego de sabanas y me hace la cama. ¡Qué recuerdos! Desde la época del Torisimo de Aerosur, que esto no me pasaba. Me gusta.

¡Qué cama! Por mucho que me estiraba, no tocaba el final… ¡que comodidad! Apretaba los ojos, esperando que el tiempo avance lentamente, porque a mi llegada pensaba que me tocaría sufrir otra sesión de realidad,  el “medical appointment” como en Agosto del 2013. (para refrescar experiencias, yo no lo necesito, está la entrada del blog).

Pero fíjate, que estaba equivocado. Me llevaron al barrio de las casitas altas. Cuidado. No confundirse, que sé que más de una suele cantar la canción de Victor Jara, con las de los pequeños burgueses de las casitas del Barrio Alto . Aquí el que tiene dinero, se nota. Así que directamente hay ricos.

Me llevaron a un centro médico privado, de primera línea. Yo esperando las largas colas, todos juntos- espalda contra pecho- y me encuentro con salas de espera vacías. Con separaciones para hombres y mujeres.  Pero que bien me está saliendo todo, hasta el clima es de lo más agradable (21º C de mínima y 34ºC de máxima). Me gusta.

 

Paseando por la verde Yacuiba

Durante mi viaje en avioneta, la visibilidad en muchos momentos es casi nula, poco más de lo que alcanza el ala. 

Estoy seguro que cuando deje de tener estas oportunidades,… lo echaré de menos. Es lo que tiene la adrenalina, que engancha.

Un día gris. Entre el jet lag  y el viaje por las nubes estoy en la frontera de lo real y lo irreal. Me acuerdo de mi hermano y de lo que piensa de mis viajes… Riéndose de Paul Newman y sus magníficas ideas, en la película de Dos hombres y un Destino. 

Por cierto...La Célebre  frase“Oh, shit. .... [arriving in Bolivia]” cuando pisa el premio al bajar del tren, a más de alguno no le hace nada de gracia.

 

Después de una parrillada en condiciones, hoy me he tomado la tarde libre. Para recuperar el aire y poder respirar y que me llegue la sangre a la cabeza, ha sido necesaria una siesta .

 

Para quitar el sopor provocada por la siesta, ha sido necesario un paseo por la zona. Si es que al final todo esta entrelazado.

Al principio todo airoso, disfrutando y fijándome en los detalles. 

-Es precioso, que colores, que vida por todas partes y cuantas risas. 

Se nota que se acercan las fiestas y hay animación preparando los disfraces.

Cuántas  diferencias con lo que te puedes encontrar por cerca de casa!…Desde los niños jugando a canicas, pasando por las señoras cargando sacos -que yo no podría ni levantarlos- y la cantidad de animales que me topaba por los caminos.

Arbol de carnaval (Senna spectabilis) y un animal listo bajo sus ramas

 

 Yo al de una hora aguantando los 37ºC , me estaba deshidratado, menos mal que siempre hay puestos de socorro ....hasta en los lugares más recónditos. Y a pesar de lo que decía mi profesor de lengua...el cerebro discrimina y todo se entiende.

Después del esfuerzo realizado solo me queda tomar una infusioncita.., que tiene “maca andina”, según el prospecto aumenta la fuerza, la libido, la resistencia, el rendimiento deportivo y la sensación de bienestar general. Solo falta saber si daré positivo en un control antidoping.